La Oferta Irrechazable: El rodaje de "El Padrino. Parte II"

El presupuesto inicial partió de 6.000.000 de dólares, suma que coincidió con la que en definitiva supuso el rodaje de la primera parte. No obstante, este filme era mucho más ambicioso, pues se debía recrear la NYC de la década de 1920 y, además de otras muchas circunstancias, el coste final superó los 13.000.000 de dólares. Pese a esta cuestión, la Paramount apenas tuvo injerencias durante el rodaje, siendo muy permisivos con Coppola, habida cuenta que tal condición se había recogido en el contrato y que a esas alturas la confianza de la productora en el director era muy superior a lo que lo fue durante la etapa anterior.

Varias escenas que se recogían en el guion no llegaron a rodarse como consecuencia de lo que habría encarecido el llevarlas a cabo, como una en la que trabajadores italianos colocaban los mosaicos de Times Square, algunas en las que aparecía el tenor Enrico Caruso y una fiesta celebrada bajo el Brooklyn Bridge, del mismo modo que otras muchas, pese a rodarse, se suprimieron del metraje comercial, tanto en la etapa de los inicios del joven Vito como en la de apogeo de Don Michael Corleone.

La recreación de la ciudad durante la época de llegada del niño Vito Andolini y los años del joven Vito Corleone supuso un importante gasto, pues se hubieron de cortar calles, crear ambientes, negocios, mercados, colocar el alumbrado de la época, etc. Al principio los vecinos de la zona mostraron cierto entusiasmo ante la idea de que su barrio fuese el escenario de la película, pero a medida que avanzaba el rodaje se fue convirtiendo en una fuente de presión como consecuencia de las incomodidades que se causaban.

Las escenas que recrean La Habana previa a la Revolución Cubana fueron rodadas en la República Dominicana, ya que resultaba imposible grabar en el país de Castro.

Algunas fotografías disparadas durante el rodaje